
Europa atraviesa uno de los momentos más decisivos de su historia reciente. Sí. La UE, que nació como un proyecto de paz y prosperidad tras la Segunda Guerra Mundial, se enfrenta hoy a un contexto geoestratégico marcado por tensiones globales, crisis sucesivas y un caótico orden internacional cada vez más multipolar. Hay analistas que van más allá y plantean que el orden será multiplex. La guerra en Ucrania, la inestabilidad en Oriente Próximo, la competencia tecnológica con Estados Unidos y China y los desafíos internos, tales como el auge de los populismos o la transición ecológica y digital, configuran un escenario complejo que exige respuestas audaces y coordinadas.
